Abaddon el Saqueador, Abaddon el Archienemigo del Imperio cuyo nombre ha sido maldito diezmil veces a lo largo de los diezmil años de la guerra eterna. Ezekyle Abaddon era en los tiempos de la Gran Cruzada, el primer Capitán de la XVI Legión del Adeptus Astartes: los Lobos Lunares, la legión de Horus. Abaddon fue un gran héroe en las guerras de la Cruzada del Emperador, un líder reconocido y carismático, pero fácilmente irritable. Abaddon combatió junto a Horus en Ullanor en la batalla que lo convertiría a este último en Señor de la Guerra. Con Horus ascendido, Abaddon se sentía orgulloso del honor que se les había otorgado, pero con la partida del Emperador, que regresaba a Terra, Abaddon empezó a dudar de la capacidad de gobernar del Señor de la Humanidad. Sin duda este sentimiento empezó a propagarse rápidamente entre los ejércitos del Imperio como más tarde se comprobaría. Pero era Horus quien ostentaba el título y el orgullo empezó a labrase un hueco en él y por extensión al resto de su Legión, sobre todo cuando el Emperador permitió rebautizar la Legión como Hijos de Horus. Después de la guerra con los interexianos y con lo sucedido en Davin después de que Horus cayera herido, Abaddon fue clave en la actuacion de la Logia que operaba en secreto dentro de la Legión. Durante todo ese tiempo Abaddon no llegaba a participar directamente en ninguna campaña y era un hombre que se enfadaba con facilidad y que admiraba a Horus como a un dios.
Horus se curó gracias a la actuacion de la logia que Erebus, primer Capellán de los Portadores de la Palabra había importado a la Legión de Horus y en la que el Consejo de Horus estaban afiliados y de ellos Abaddon era uno de los más influyentes. Horus volvió de su curación cambiado. Poco tiempo después de una guerra en un sistema avanzado tecnológicamente pudo prometer al Mechanicum las PCE, y de esa manera tener sus lealtad. Así comenzó la Herejía y Abaddon fue nombrado Señor de la Guerra del nuevo Imperio.
Antes de la batalla de Isstvan III, Abaddon discutió con Loken sobre la lealtad que ambos tenían ante Horus y el Emperador. Al final acabaron discutiendo. Durante toda la guerra en el planeta era el encargado de dirigir a los Hijos de Horus. En los momentos finales fue al planeta junto a Horus Aximand y ambos se enfrentaron a Loken y Torgaddon. Abaddon se encargó de matar a Loken y lo persiguió por todo un edificio intentando golpearle con un puño de combate. Cuando Loken cayó inconsciente y Torgaddon hubo muerto, regresaron al Espíritu Vengativo.
En Isstvan V, luchó contra los leales al Emperador, y se dio cuenta de que Horus Aximand, luchaba como si se encontrase ausente y decidió averiguar lo que le ocurría.
En el asalto a Terra, cuando el Emperador se teleportó al Espíritu Vengativo, Abaddon también se encontraba allí pero en una zona muy lejana al puente de mando. Cuando llegó y se encontró el cuerpo de su señor, profirió un tremendo grito y ordenó la retirada de los leales a Horus.
Tras la Herejía de Horus, Abaddon tomó el mando del resto de la Legion rebautizándola como la Legión Negra en recuerdo a su derrota. En poco menos de un siglo, Abaddon atacó un sistema planetario cerca del Ojo del Terror y lo destruyó por completo antes de que se enviaran refuerzos. Esa fue la primera Cruzada Negra y desde entonces Abaddon ha protagonizado las 13 Cruzadas Negras que han hecho tambalear los cimientos del Imperio. Abaddon firmó pactos demoníacos con los Poderes Siniestros y así consiguió su Espada Dracna'yen en las ruinas de Irulan, un mundo demoníaco.
Equipado con la espada y la antigua arma de su señor, la Garra de Horus, Abaddon ha causado destrucción a lo largo del Imperio durante siglos en la guerra eterna, es el enemigo más peligroso y se ha temido siempre que un día se haga con el poder que Horus tuvo, reúna a las antiguas Legiones y vuelva para acabar lo que Horus empezó hace 10.000 años.
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